475 gr de harina
18 gr de levadura
2 huevos
25 gr de leche en polvo
200 cc de agua aprox
100 gr de azúcar
5 gr de sal
75 gr de Mantequilla
Miel y Azucar glass para decorar.
Vamos a hacer un volcan con el harina y en el centro vamos a agregar el agua y la levadura, vamos a mezclar un poco del harina que rodea el agua, tapamos con un trapo seco y dejamos que se active la levadura por aproximadamente 15 minutos. Pasado ese tiempo la levadura se tiene que ver esponjosa y viva, podemos ver burbujas en toda la superficie. Acto seguido vamos a agregar el resto de los ingredientes, primero la leche en polvo y el azucar, luego los huevos de uno en uno, luego la mantequilla que debera estar derretida y a temperatura ambiente y por ultimo la sal. Vamos a amasar solo un poco a que quede todo integrado y dejaremos reposar la masa durane una hora, pasado este tiempo la masa debera haber crecido al doble de su tamaño original.
Vamos a sacarle el aire a la masa y a batirla en la batidora por 15 minutos con el utensilio del gancho, la masa se debera ver mas tersa y elastica y habra perdido humedad de tal forma que ya no se pegue ni en las manos ni en las paredes de la batidora.
Una vez que nuestra masa esta lista podemos comenzar a cortar nuestros beignets, vamos a alisar la masa con un rodillo a que tenga 5mm de grosor, cortamos rectangulos de 7×10 cm aproximadamente los acomodamos en una charola con papel encerado y tapamos con un trapo seco porque otra vez van a reposar esta vez por 25 minutos, durante este tiempo podemos comenzar a calentar el aceite en la olla que los vamos a freir. Recomiento usar abundante aceite ya que de esta forma se doraran mas parejitos y aunque parezca lo contrario, cuando usamos suficiente aceite absorben menos aceite que si usamos poquito.
Pasados los 25 minutos de reposo los rectangulos de beignets deberan haber crecido un poco y los vamos a pasar al aceite caliente con cuidado de no deformarlos, los vamos a dorar de un lado y cuando ya se vean doraditos los vamos voltear en el aceite para que se doren del otro lado y al mismo tiempo nos podremos dar cuenta como se inflan para convertirse en nuestros suaves y esponjositos beignets.
Los pasamos a una charola con papel absorbente y cuando los terminemos de freir todos los podemos acomodar en el plato en que se van a servir.
Si vieron la pelicula de la princesa y el sapo recordaran que los beignets se bañan con miel y luego se espolvorean con azucar glass, asi que eso es lo que haremos para terminar nuestros beignets.